Tradición y calidad desde 1920

La Panadería Ca'n Molinas fue fundada en el año 1920 por Don Miguel Cañellas Nadal y Doña María Estrades Estrades, ubicándose en la calle de la Rosa nº 4, en la preciosa localidad de Valldemossa.

A mediados de siglo, la segunda generación de la saga familiar tomó las riendas del negocio; Don Bernardo Cañellas y su esposa Doña Antonia Calafat continuaron con la tradición y el buen hacer que caracteriza al establecimiento. En la actualidad es regentado por sus dos hijos; Miguel Ángel y María del Pilar, que defienden con orgullo y pasión un legado de tres generaciones de maestros artesanos.

La coca de patata, emblema de Valldemossa

Dentro de la dilatada gama de productos artesanales que elaboramos en Ca'n Molinas, quizás el más emblemático sea la famosísima coca de patata, un hito de la cultura tradicional Mallorquina, enseña de identidad de la localidad Valldemossina, y como no, sello y marca de la calidad de este horno.

Además no hay que olvidarse de otras especialidades como las cocas de anís, los mantecados, el delicioso gató de almendra o de avellana, los tradiconales robiols y empanadas de carne dulces, buñuelos, bescuit, tartas variadas, cuartos, ensaimadas y otras variedades de coca de patata. A destacar las de pimientos rojos y con sobrasada.

Artesanía y dedicación, en el horno de Ca'n Molinas

La artesanía y la tradición no está reñida con la modernidad y la evolución; a día de hoy utilizamos el horno moruno que han mantenido desde la primera generación, en el que se cuece el pan y todas las recetas  de la casa, impregnándolas de ese misterioso toque que solo un buen fuego de leña puede darle a todas y cada una de las especialidades.

Materia prima de calidad superior y formulas secretas heredadas durante generaciones, dan como resultado prestigio y reconocimiento por parte de una clientela fiel a las especialidades de Ca'n Molinas; ya sean oriundos de Valldemossa, o gente que se acerque hasta la preciosa localidad, todos disfrutan y se deleitan degustando un pedazo de historia.

Coca de patata, sola pero también acompañada

Tradicionalmente la coca de patata se presentaba en porciones provenientes de una pieza de mayor tamaño; fue el patriarca fundador, Don Miguel Cañellas, quien mejoró la fórmula y comenzó a despachar estas delicias en formato individual, sistema que ha perdurado hasta nuestros días.

Esta especialidad se puede disfrutar sola o acompañada de un buen chocolate a la taza, con un cremoso y delicioso helado, con horchata de almendra, con turrón… su delicada textura mimetiza con cualquier complemento, dulce o salado.

Le esperamos en Ca'n Molinas

En 1977 se inauguró una sucursal en la  Vía Blanquerna de Valdemossa, en cuyo local se pueden comprar todas las especialidades, además cuenta con una maravillosa terraza donde se puede degustar un buen café, un delicioso helado o simplemente maravillarse con una buena coca de patata.

Ca'n Molinas les ofrece la posibilidad de degustar sus especialidades admiradas y respetadas durante generaciones, en sus establecimientos de Valldemossa: Calle Rosa nº 4 y Vía Blanquerna nº 15.